La navegación de recreo es una de las MEJORES maneras de explorar nuestros mares y océanos. Navegamos porque nos encanta explorar, descubrir las maravillas que encierran en la infinita diversidad de entornos marinos.
Ya sea descubriendo nuevas costas, islas inexploradas, bahías y entrantes de mar, la navegación recreativa es una de las formas más increíbles de ver y apreciar la magia de nuestros océanos. Y dado que cada vez más personas se aventuran en el mar para vivir esta experiencia, y viajan más lejos para evitar las multitudes, nuestras anclas son uno de los equipos más importantes de nuestros barcos, y es importante usarlas correctamente.
Cómo y dónde echamos el ancla tiene un impacto cada vez mayor en los ecosistemas marinos.
Echar el ancla es a menudo indispensable, especialmente cuando no hay marinas, muelles o boyas de amarre, pero como objetos muy pesados, con una cadena igualmente pesada unida a ellos, nuestras anclas pueden tener un impacto sin precedentes en los corales y praderas marinas restantes, y en aquellos que ya han comenzado a regenerarse.
Una vez que hemos echado anclas, y debido a los cambios en el viento y las mareas, estas pueden arrastrarse más de 10 metros sobre el lecho marino, a menudo arrasando las praderas marinas como la posidonia, los corales y los organismos vivos que habitan en el fondo marino.
Es un poco cómo talar un bosque...
Los arrecifes de coral y las praderas marinas, en particular, son áreas de alimentación, reproducción y cría para una serie de especies marinas. Cuando estas áreas se dañan, las especies y los sistemas que mantienen en nuestros mares, incluidas las cadenas alimentarias, también se ven gravemente afectados.
La naturaleza no tiene precio, ¡pero estudios han estimado que el costo de reemplazar un metro cuadrado de coral dañado es de alrededor de 3,000 USD! ¡Es mucho!
Buenas prácticas para echar anclas
Por lo tanto, es MUY importante verificar el lecho marino donde echamos nuestro ancla y recuperarlas, y dirigirnos hacia otras opciones de amarre cuando sea posible. ¡Aquí tienes una pequeña lista de verificación de las buenas prácticas a tener en cuenta cuando navegues este verano!
Los buenos consejos para echar anclas respetando el medio ambiente:
✓ Utiliza siempre las boyas de amarre cuando estén disponibles. Se colocan estratégicamente para ayudar a proteger los fondos marinos y la vida que albergan.
✓ Consulta los mapas y Navily para encontrar las zonas de fondeo designadas: úsalas tanto como sea posible.
✓ Verifica con el propietario del barco o la empresa de alquiler dónde están ubicados los fondeaderos y muelles designados.
✓ Mantente alejado de los corales, las praderas marinas, los bosques de algas y los fondos marinos ricos en vida. ¡Aunque son geniales para descubrir con máscara y snorkel, debemos mantenernos alejados con nuestras anclas!
✓ Utiliza guías de navegación, conocimientos locales o blogs, así como comentarios de usuarios en Navily para comprender dónde es mejor echar el ancla sin dañar los hábitats vírgenes.
✓ Atención: tu cadena puede causar tanto daño como tu ancla, especialmente cuando el viento cambia y tu barco gira alrededor del ancla. La cadena entonces raspa el fondo. ¡Así que asegúrate de encontrar un área con suficiente arena para que tu cadena también descanse en ella!
¡Juntos, protejamos los mares en los que nos encanta navegar!
¡Que te vaya bien, Capitán!
El Equipo de Clean Sailors y el Pulpo